Con más de 600 personas asesinadas de manera violenta, el 2012 fue el año con más víctimas derivado a la disputa por la plaza entre células del crimen organizado, después de que fuera abatido Arturo Beltrán Leyva hace cuatro años en la capital de Morelos.
La Procuraduría General de Justicia del estado reveló que en el año recién concluido 615 personas fueron ejecutadas por integrantes de organizaciones delictivas, de las cuales 228 eran jóvenes no mayores a 29 años; 31 menores de edad y 61 mujeres, en su mayoría con signos de tortura y lesiones producidas por arma de fuego.
Con base a los datos de la dependencia estatal, julio fue el mes más violento al cometerse 79 asesinatos, entre ellos, el de siete personas que fueron decapitadas, cuyos cuerpos aparecieron al interior de una camioneta sobre la carretera Alpuyeca-Jojutla.
En tanto, septiembre registró 66 casos; mayo 59; mayo 59; octubre 56; 51 junio y el resto de los meses cerraron con 40 homicidios, algunos de ellos los cadáveres fueron quemados o mutilados, junto con cartulinas en cuyos textos grupos delictivos se atribuían los actos.
Con la implementación del plan Morelos Seguro, a cargo del gobierno del panista Felipe Calderón, 448 víctimas perdieron la vida en hechos distintos, pese a que se reforzó la seguridad con el apoyo de militares y agentes de la policía federal, principalmente la zona sur de la entidad.
A tres meses de iniciar el gobierno de la Nueva Visión con Graco Ramírez Abreu, 136 personas, en su mayoría jóvenes y mujeres, han sido asesinadas por actos relacionados al narcotráfico, de acuerdo con cifras del Servicio Médico Forense (Semefo), adscrito a la fiscalía morelense.
