SIN LINEA
***En cuestión de drogas, México pone los muertos y EU los drogadictos
José SANCHEZ LOPEZ
EN México, el saldo de la guerra contra las drogas es de cuando menos
100 mil muertos (oficialmente el Gobierno Federal acepta 47 mil), y el
costo ha sido de cientos de miles de millones de pesos, monto superior
a los 900 millones que Estados Unidos dio a nuestro país como "apoyo"
para combatir a las drogas. Es paradójico que el principal país
consumidor de drogas en el mundo sea el que, autoerigiéndose en
paladín, certifique a los demás respecto a su lucha contra las drogas.
La población de Estados Unidos rebasa los 310 millones de habitantes y
de ellos, cuando menos el 50 por ciento son adictos, es decir hablamos
de 150 millones de norteamericanos que consumen habitualmente algún
tipo de enervante. Aquí en México se ha vuelto una obsesión
gubernamental acabar con el narcotráfico, mientras que en la Unión
Americana su principal preocupación es que deje de fluir la droga
hacia su país. Cálculos conservadores estiman que los estadounidenses
se gastan anualmente no menos de 220 mil millones de dólares en
drogas. Los crímenes masivos se han vuelto comunes en dicha nación y
por lo regular los culpables son ex combatientes a los que el mismo
gobierno norteamericano volvió adictos para que pelearan mejor. Aquí
en nuestro país, mientras que no pasa un día sin que traten de
encontrar formas de impedir el paso de drogas hacia los EU, en el
vecino país cada día cobra mayor legalidad el consumo de
estupefacientes. De los 50 estados que conforman la Unión Americana,
ya se legalizó en 18 el consumo de la mariguana. En 16 de ellos dicen
que es para "uso medicinal", mientras que en los otros dos, Colorado y
Washington, últimos en legalizarla, de plano admiten que es con "fines
recreativos". El caso es que ya hay "invernaderos" donde se cultiva la
Cannabis Sativa y se presume que esa si es mariguana de verdad y no la
basura que les llega de México. PAUL STANFORD, calificado como "El
Magnate de la Cannabis", comercializa la droga "con fines curativos" y
gana no menos de 10 millones de dólares anualmente por sus
invernaderos en Michigan y Hawái. Ahora, con la legalización del
"consumo recreativo de la mariguana", es necesario que nuestro
gobierno revise su estrategia en la lucha antinarco, pero sobre todo
en materia de seguridad pues la violencia está ligada al tráfico de
drogas. El presidente electo, ENRIQUE PEÑA NIETO, está en contra de
cualquier legalización, pues no es el camino correcto para enfrentar
un problema de salud pública y seguridad. Para el próximo gobernante,
nuestro país no puede darle un trato a un producto que es ilegal en
México, intentando evitar el trasiego hacia los EU, cuando allá tiene
un estatus legal. Así, mientras que nuestro país se desangra con miles
y miles de muertos en su estéril lucha, en EU avanza cada vez más
imparable la legalización de las drogas. El argumento es lo de menos,
cubrir la adicción es lo importante. Bajo esa premisa
norteamericana…¿Será posible acabar con el narcotráfico?***ES
IMPOSIBLE CURAR AL ENFERMO CUANDO ESTE NO QUIERE SANAR.***AU REVOIR.
joebotlle@gmail.com
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