| Las investigaciones sobre el asesinato del alcalde de La Piedad, Ricardo Guzmán Romero, ocurrido el miércoles en el oeste de México, "van por buen camino", dijo hoy el gobernador de Michoacán, Leonel Godoy, quien confía en dar pronto con los responsables del crimen. "Se tienen vídeos de vigilancia de la zona, hay retratos hablados, se tiene plenamente identificada la unidad del vehículo con el que se cometió el delito", declaró a la emisora MVS el gobernador, del izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD). Explicó que el automóvil del que se valieron los autores del "cobarde asesinato (...) fue robado ese mismo día" en la ciudad de La Piedad, escenario del crimen, "a un ciudadano que denunció el hecho". La Procuraduría General de Justicia de Michoacán, que ha asumido el caso y con la que colaboran otras dependencias federales y de los estados de Guanajuato y Jalisco, "está reconstruyendo el minuto a minuto no solo del hecho, sino lo que rodeó antes y después" el crimen del edil. "Se está obteniendo bastantes evidencias para esa reconstrucción y por eso confiamos en que pronto vamos a dar con los responsables", indicó el gobernador mexicano. Detalló que por lo recabado hasta ahora a través de 11 testimonios se sabe que los agresores fueron "cuatro personas", y se ha confirmado que el alcalde Guzmán Romero había recibido amenazas antes del asesinato. No obstante, Godoy dijo desconocer de dónde procedían las amenazas en un estado en el que han sido asesinados 4 de los 32 alcaldes mexicanos que han perdido la vida desde fines de 2006. Ante los comicios previstos para el 13 de noviembre próximo, de los que saldrá su sucesor, señaló que se está haciendo "un esfuerzo enorme" para llegar a la jornada "en condiciones absolutamente propicias". El fiscal de Michoacán, Jesús Montejano, apuntó ayer que 7 de los 113 municipios del estado son considerados "áreas de cuidado" (focos rojos) por los riesgos que pueda haber el día de la elección, entre los cuales está La Piedad, donde fue acribillado el alcalde. Godoy también lamentó las críticas de algunos miembros del Partido Acción Nacional (PAN), que postula en el estado a Luisa María Calderón, hermana del presidente de México, Felipe Calderón, responsabilizando al Gobierno de Michoacán de no haber hecho lo suficiente para prevenir el asesinato del alcalde. "Es condenable lo que están haciendo los panistas en este caso porque querer sacar raja electoral. Me parece que todos lo debemos repudiar" un crimen que "ensombrece" el ambiente preelectoral, dijo. Recordó que no tenía sentido culpar a Michoacán de un crimen cuando había casi 3.000 servidores públicos asesinados desde que asumió el poder el presidente Calderón en diciembre de 2006, y al mandatario, del PAN, nadie le responsabilizaba de todos y cada uno de ellos. Calderón lanzó una guerra frontal contra el crimen organizado que, si bien ha arrojado importantes capturas de capos, la violencia se ha recrudecido a raíz de los enfrentamientos entre los carteles de las drogas y de estos con las fuerzas de seguridad, lo que ha provocado más de 40.000 muertes. |
