ACAPULCO.- México es el país más atractivo de la región para que grandes jugadores de la banca de inversión financien proyectos relacionados las reformas, sin embargo el conexto mundial ha evitado que se pise el acelerador en las inversiones.
Tanto Bank of America Merryl Lynch como Barclays ven un plan de inversión prioritario en México a nivel mundial, en contraste con la salida de algunos negocios de los bancos en América Latina, en particular en Brasil.
"La realidad es que México sí se ha diferenciado mucho de otros mercados, no sólo por la solidez en el frente macroeconómico, sino también por las oportunidades que se vienen en energía, infraestructura y telecomunicaciones, y en el mismo sector financiero que está creciendo" dijo en entrevista Raúl Martínez Ostos, presidente y director general de Barclays México.
De acuerdo con líderes bancarios que inyectan capital en grandes proyectos, México se ve más conectado, desde el punto de vista financiero y económico con la región de América del Norte.
"México ya es parte de Norteamérica (...) eso hace que hoy por hoy el futuro que vemos más promisorio a nivel mundial es el bloque de América del Norte", sostuvo en entrevista Emilio Romano, director general de Bank of America Merril Lynch (BofAML).
En 2015, la economía mexicana creció 2.5% y para este año el Banco de México recortó su estimación de crecimiento a 2%-3%. El rango estimado del país -según los directivos- es envidiable en comparación con países de la región.
Pese a estas condiciones internas, la volatilidad mundial y divergencias en temas políticos, como el debate sobre la permanencia del Reino Unido en la Unión Europea, ha hecho que los capitales en el país se desaceleren, explicó el directivo de Barclays.
"En un contexto en el que el mundo está tan complicado en tantos frentes (…) ese es uno de los grandes desafíos que tiene México", agregó Raúl Martínez.
BofAML destaca el crecimiento de América del Norte en contraste con el 80% de los participantes de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) que están en recesión o nulo crecimiento. Además de su autosuficiencia en energía por el descubrimiento del fracking y de gas natural.
El país tiene en la reforma energética una de las claves para detonar estas inversiones a mediano y largo plazo, coinciden ambos directivos de la banca de inversión.
"El efecto multiplicador que tiene la reforma energética sobre la actividad económica es tal como lo fue el Tratado de Libre Comercio en el país", destacó director general de Barclays México, que tiene cuatro años en el país y piensa incrementar sus inversiones.
Para 2016, el Gobierno mexicano se comprometió a agilizar la estrcuturación de proyectos energéticos para que los bancos puedan capitalizarlos, puntualizó Emilio Romano. Esta promesa se hace en medio de una caída en los precios del crudo y un recorte al gasto público equivalente a 0.7% del Producto Interno Bruto (PIB).
El recorte al gasto incluye un ajuste al presupuesto de Pemex de 100,000 mdp, mientras que el ajuste a la inversión será 13,227 mdp, según cifras de la misma dependencia.