MÉXICO, D.F. .- El PRI regresará a la Secretaría de Gobernación el poder para dirigir la política interior del país, coordinar a los gobiernos estatales y municipales, atender el sistema carcelario, fortalecer la labor de inteligencia; por consiguiente, estará a cargo de toda la seguridad, tanto interior como nacional al absorber a la Secretaría de Seguridad Pública.
Al dar a conocer su iniciativa de reorganización de la administración pública federal y la que contiene la creación de la Comisión Nacional Anticorrupción, Enrique Peña Nieto advirtió que se las entrega a los coordinadores parlamentarios de diputados y de senadores para que se aprueben antes del 1 de diciembre y poder "reorganizar la administración" en los días de la transición.
La Comisión Nacional Anticorrupción fue anunciada el 29 de marzo pasado por Peña Nieto al arrancar su campaña electoral; después en los primeros días de septiembre se filtró en los medios cómo funcionará y cuáles son sus objetivos, en tanto que la iniciativa para reestructurar la administración pública federal apenas empezó a comentarse a inicios de semana.
Este miércoles, Peña Nieto entregó a Emilio Gamboa Patrón, coordinador de los senadores priistas, la iniciativa que crea la Comisión Nacional Anticorrupción para que el grupo parlamentario del PRI la haga suya y la presente ante el pleno; en tanto que a Manlio Fabio Beltrones Rivera, coordinador de los diputados, le entregó la reforma constitucional que reorganiza la administración pública federal.
Con la llegada del PAN a la Presidencia de la República en el año 2000, Vicente Fox creó un nuevo concepto de la burocracia federal, con nuevas secretarías como la de la Función Pública, debilitó el trabajo de la Secretaría de Gobernación, descentralizó muchas de sus funciones y, fortaleció a la Secretaría de Seguridad Pública; su predecesor, Felipe Calderón, mantuvo el mismo esquema de asignación de tareas.
El desmantelamiento de la Secretaría de Gobernación, hoy vuelve a replantearse con la propuesta de Peña Nieto, quien, además, pretende dar mayor peso político a la Secretaría de Desarrollo Social en un esquema similar al que mantuvo en el sexenio de Carlos Salinas de Gortari.
En su propuesta de reforma, Peña Nieto propone transformar la Secretaría de la Reforma Agraria en la de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, "en consideración a algo que ha evolucionado en nuestra sociedad en las últimas décadas", dijo.
Comentó que la mayor concentración demográfica se encuentra en las urbes con un 78% de la población.
Esta nueva secretaría asumirá el trabajo que desde tiempos priistas venía desempeñando Comisión para la Regularización de la Tenencia de la Tierra (Corett), un organismo descentralizado de la SRA. Ahora, la nueva secretaría sumará este trabajo de la Corett para "proteger los derechos agravios que prevé el artículo 27 de la Constitución", comentó Peña Nieto.
Además, coordinará con autoridades estatales y municipales la planeación y el reordenamiento territorial nacional, y los asentamientos humanos; igualmente, deberá promover el desarrollo urbano y metropolitano del país.
Regresa la supersecretaría
En el caso de la Secretaría de Gobernación, que en tiempos panistas se convirtió en una especie de oficialía de partes que nunca pudo resolver conflictos políticos, Peña Nieto la está ubicando como eje del manejo de la política interna y de seguridad.
Según la descripción que hizo ante los coordinadores parlamentarios, desaparecerá la SSP y Gobernación asumirá sus funciones de:
"Ejercer el mando sobre la Policía Federal y Auxiliar, y coordinar las políticas e instancias de información, de seguridad nacional y criminal.
"De igual manera, el que continúe como hasta ahora lo viene haciendo, pero ya siendo parte de un sistema integral por la seguridad interior, las tareas que realice en materia de migración, población e identificación personal."
Entre los cambios a la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal, Peña Nieto anunció que Gobernación fortalecerá "su autoridad para garantizar la seguridad y protección de la población".
Así, propone que sea Gobernación la que asuma la rectoría del Sistema Nacional de Seguridad Pública, haciendo a un lado a la Secretaría de Seguridad Pública, que hoy encabeza Genaro García Luna.
Como en los tiempos priistas, se le otorga también, "la conducción en materia de seguridad interior, prevención del delito y del sistema penitenciario. La de desarrollar tareas de vigilancia fronteriza y de protección civil… De igual forma, se propone que en materia de coordinación y diálogo político, Gobernación se encargue de conducir la política interior y de llevar a cabo las relaciones con los otros poderes, los distintos niveles de gobierno y actores políticos".
Incluso, se le regresa a esta secretaría su trabajo en materia de derechos humanos, pues "estará facultada para encabezar los trabajos de promoción, así como dar atención y seguimiento a las recomendaciones que emitan los órganos competentes en la materia, para asegurar su cumplimiento".
La propuesta contempla también desaparecer la Secretaría de la Función Pública. Algunas de sus funciones será asumidas por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, pero básicamente el trabajo lo haría la nueva Comisión Nacional Anticorrupción.
En materia social, Peña Nieto propone darle mayor fuerza a la aplicación de políticas sociales reforzando así el combate a la pobreza y la desigualdad.
En síntesis, el organigrama de la administración pública que tiene 18 secretarías pasaría a 16, pero en los hechos sólo se está desapareciendo una; es decir, desaparece la SRA, la SSP y la SFP, pero bajo el nuevo esquema la SRA sería renombrada por Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano; en el caso de la SFP, que desaparece, en su lugar se creará la Comisión Nacional Anticorrupción; sólo la SSP desaparece realmente, pues sus funciones las asumirá la Secretaría de Gobernación.
Se espera que ambas iniciativas sean presentadas este jueves en los plenos del Senado de la República y en el de Cámara de Diputados.(Apro)