Los hechos ocurrieron el 12 de noviembre, cuando personal de la Aduana en conjunto con personal del Centro de Atención a Incidentes Marítimos y Portuarios (CUMAR), dependiente de la Secretaría de Marina-Armada de México, efectuaron una revisión física al contenedor que había sido descargado de un buque procedente de Turquía.
En dicho contenedor se encontraron 40 sacos de papel con semillas, por lo que se solicitó la intervención del Ministerio Público de la Federación para realizar el levantamiento de las muestras y hacer los análisis correspondientes.
Como resultado, se obtuvo que la semilla es de la denominada papaver somniferum o planta de opio, con un peso neto de 988,905 kilogramos.
La mercancía fue puesta a disposición del agente del Ministerio Público de la Federación por la Policía Federal Ministerial, con la finalidad de realizar las investigaciones pertinentes y deslindar las responsabilidades legales que resulten procedentes, integrándose la averiguación previa correspondiente.
Aseguramientos como éste se logran gracias a la coordinación de instituciones federales y al reforzamiento de las medidas de seguridad en las aduanas que impiden que mercancía que puede poner en riesgo la salud de las personas ingrese a territorio nacional.
