* El desarrollo nacional y los programas sociales se financiarán con recursos presupuestales, puntualiza
Los programas de desarrollo económico y social se financiarán con recursos públicos y "no hará falta expropiar ni quitarle a nadie su patrimonio", aclaró Andrés Manuel López Obrador.
"No se trata de despojar a nadie ni de quitarle a los ricos para darle a los pobres", precisó en respuesta a sus adversarios que distorsionaron en el 2006 su lema de campaña "Por el bien de todos, primero los pobres".
El precandidato presidencial del PRD, PT y Movimiento Ciudadano hizo énfasis en que solo bastará con distribuir con justicia el presupuesto nacional para generar fuentes de trabajo, reactivar la economía y garantizar mínimos de bienestar a la mayoría de los mexicanos, sin necesidad de recurrir a otras fuentes de financiamiento.
En el tercer día de precampaña por la capital de la República, consideró como un pecado social la monstruosa desigualdad que impera en el país y puso de ejemplo que las familias carecen de recursos económicos hasta para surtir una receta médica.
Sin embargo, hizo el compromiso de que la próxima administración vigilará que los poco más de 3.5 billones de pesos del presupuesto público se manejen con honestidad y transparencia, en caso de favorecerle el voto en la elección presidencial del 1 de julio de 2012.
Ante cientos de simpatizantes que se reunieron en la explanada delegacional de Milpa Alta, López Obrador adelantó: "Vamos a gobernar para todos, vamos a escuchar a todos y vamos a atender a todos, pero la preferencia se enfocará en la gente pobre".
Tanto en los mítines en Milpa Alta y Xochimilco, como en Tláhuac y Tlalpan, afirmó que la crisis que padece el país en los órdenes económico y social son resultado del estancamiento económico y ofreció un cambio en la forma de hacer política, así como reactivar las actividades productivas y otorgar oportunidades de trabajo y de estudio a los jóvenes.
Sostuvo que la paz y la tranquilidad social son fruto de la justicia al explicar que México ocupa el último lugar en las economías de América Latina, por la corrupción imperante en todos los niveles de gobierno y de la cual solo se benefician unos cuantos.
Luego hizo el compromiso de rescatar al campo y de alcanzar la autosuficiencia alimentaria, así como apoyar a las pequeñas y medianas empresas y comercios que en conjunto generan el 90 por ciento de los puestos de trabajo a nivel nacional.
Al presentar las acciones que pondrá en marcha, si le favorece el sufragio popular, dijo que habrá una pensión alimentaria para todos los adultos mayores del país, a partir de los 68 años, pero la edad se reducirá a 65 años, en aquellos casos en donde los ancianos respetables habiten en las zonas rurales.
También se otorgarán becas a las madres solteras, personas con discapacidad y estudiantes que cursen sus estudios de bachillerato, abundó.
En la jornada de este día acompañaron a López Obrador dirigentes de los tres partidos que lo postulan, así como aspirantes del PRD a la jefatura de Gobierno del Distrito Federal.
De manera particular, convocó a los habitantes de Milpa Alta y Tláhuac a participar en la lucha por la transformación de México como protagonistas del cambio verdadero, porque está en juego el futuro de la nación.
Y vislumbró sólo dos escenarios: Que se mantenga el actual régimen de corrupción, de injusticias, de opresión y de privilegios o que haya una transformación de la vida pública de México a favor de la mayoría de la población.
Para mañana, López Obrador encabezará mítines en las delegaciones Magdalena Contreras, Cuajimalpa y Miguel Hidalgo. |