MEXICO.-“Las actuales condiciones económicas del país no son favorables para que el gobierno federal quiera emitir la cédula ciudadana y lo que se busca es favorecer a alguna empresa particular como ocurrió en su momento con el caso Hildebrando-Zavala Gómez del Campo”, afirmó el diputado del PRD, José Alfonso Suárez del Real y Aguilera.
Aseguró que cada cédula costará ocho pesos, lo que ocasionaría un gasto aproximado de 856 millones de pesos, más la adquisición del software y maquinas que registren las huellas digitales, rostro e iris de las personas. Por lo que señaló que los tres mil millones de pesos proyectados para este fin serán insuficientes para las 32 entidades existentes en el país, la cuales cuentan con más de tres mil municipios, de casi 500 ciudades medias.
A su vez senadores del PRD solicitaron que el gobierno federal suspenda la expedición de la Cédula de Identidad Ciudadana (CEDI), por considerar que ante la situación de crisis económica en el país, sería imprudente gastar los 3 mil millones de pesos que se tienen contemplados para este documento oficial.
Suárez del Real y Aguilera comentó que existe una grave descoordinación en el gobierno, pues el secretario de Hacienda, quien ha reconocido el shock económico por el que pasa México, debería informarle a la Secretaría de Gobernación que no hay dinero para la Cédula, “que es momento de atender la terrible crisis económica que están resintiendo los tres mil municipios del país, ya que no tienen dinero para pagar la nómina del mes de agosto, octubre, noviembre y diciembre”.
Suárez del Real explicó que pese a que la Ley General de Población establece que debe expedirse una Cédula de Identidad Ciudadana, es irresponsable que se piense en un nuevo documento cuando ya existe la credencial de elector, misma que cubre los requisitos que marca dicha ley y que garantiza la identidad legal y jurídica.
Indicó que en España existe el Documento Nacional de Identidad (DNI), el cual se emite desde el momento que nace un ciudadano y en donde los menores de edad tienen constancia de las vacunas, de en qué escuela estudian y cuando el ciudadano adquiere la mayoría de edad, el DNI se convierte en un documento que permite la votación.
Tomás Torres Mercado señaló que emitir una nueva Cédula de Identidad, duplicará esfuerzos y gastos, no solamente al crear el Registro y expedir esta ficha de identidad, sino que habrá de tener una actualización continua, como la tiene el Padrón Electoral, lo cual genera también gastos constantes.
Aseguró que cada cédula costará ocho pesos, lo que ocasionaría un gasto aproximado de 856 millones de pesos, más la adquisición del software y maquinas que registren las huellas digitales, rostro e iris de las personas. Por lo que señaló que los tres mil millones de pesos proyectados para este fin serán insuficientes para las 32 entidades existentes en el país, la cuales cuentan con más de tres mil municipios, de casi 500 ciudades medias.
A su vez senadores del PRD solicitaron que el gobierno federal suspenda la expedición de la Cédula de Identidad Ciudadana (CEDI), por considerar que ante la situación de crisis económica en el país, sería imprudente gastar los 3 mil millones de pesos que se tienen contemplados para este documento oficial.
Suárez del Real y Aguilera comentó que existe una grave descoordinación en el gobierno, pues el secretario de Hacienda, quien ha reconocido el shock económico por el que pasa México, debería informarle a la Secretaría de Gobernación que no hay dinero para la Cédula, “que es momento de atender la terrible crisis económica que están resintiendo los tres mil municipios del país, ya que no tienen dinero para pagar la nómina del mes de agosto, octubre, noviembre y diciembre”.
Suárez del Real explicó que pese a que la Ley General de Población establece que debe expedirse una Cédula de Identidad Ciudadana, es irresponsable que se piense en un nuevo documento cuando ya existe la credencial de elector, misma que cubre los requisitos que marca dicha ley y que garantiza la identidad legal y jurídica.
Indicó que en España existe el Documento Nacional de Identidad (DNI), el cual se emite desde el momento que nace un ciudadano y en donde los menores de edad tienen constancia de las vacunas, de en qué escuela estudian y cuando el ciudadano adquiere la mayoría de edad, el DNI se convierte en un documento que permite la votación.
Tomás Torres Mercado señaló que emitir una nueva Cédula de Identidad, duplicará esfuerzos y gastos, no solamente al crear el Registro y expedir esta ficha de identidad, sino que habrá de tener una actualización continua, como la tiene el Padrón Electoral, lo cual genera también gastos constantes.