MEXICO.-Cambios como la reelección, la revocación de mandato de gobierno, la redición de cuentas y la transparencia, son temas que deben impulsarse y fortalecer en las instituciones, para asegurar la viabilidad de la democracia, consideraron los comentaristas invitados a la presentación del libro “El Diseño de la Democracia” editado por el Instituto Electoral del Distrito Federal (IEDF).
Durante la presentación, moderada por el consejero electoral del IEDF Gustavo Anzaldo Hernández, el autor Aldo Muñoz Armenta comentó que actualmente la ciudadanía valora negativamente a los diputados y senadores, califica muy bajo a los partidos políticos, manifiesta desconfianza hacia las autoridades y cada vez menos personas están interesadas en involucrarse en actividades relacionadas con la política.
Al autor del capítulo “Límites y alcances del diseño institucional de la representación política en México: el caso de los legisladores y la rendición de cuentas”, consideró que una de las principales fallas en el diseño de la representación política en México. “Es que los legisladores no están obligados a rendir cuentas al público en su calidad de depositarios de la soberanía en una democracia, y no dan cuenta ni responden sobre el uso de sus poderes y responsabilidades”, precisó.
Al participar como comentarista, la profesora de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, Rosa María Mirón, puntualizó que pretender que la democracia se limita al ejercicio periódico del sufragio es ignorar los derechos civiles y políticos de los ciudadanos, así como las condiciones jurídicas, sociales y políticas elementales para dar certeza al valor de cada voto.
Por último, mencionó que no podemos pretender que nuestra democracia funcione, sin soportar su ejercicio en los valores de la cultura democrática. “Poner oídos sordos a la diferencia, necear la diversidad, pretender ignorar todas las voces y pasar por alto todas las riquezas y las enormes oportunidades que representa el reconocimiento de nuestra realidad compleja y plural, es condenarnos a dejar como únicas válvulas de expresión a las voces de la desesperanza y la violencia” agregó.
