Presionan cañeros alza al precio de la azúcar
*Prevén alza generalizada de alimentos afectando al consumidor
Gabriel Castillo García
La excesiva importación de fructosa para el uso industrial y la caída paulatina de los precios del azúcar mexicano, implicará en el corto plazo un encarecimiento de su precio al menudeo, afectando directamente el consumo de este producto y de los artículos elaborados con el edulcorante, reiteraron líderes cañeros consultados.
De acuerdo con los lideres cañeros, el problema generará una burbuja que podría implicar una espiral inflacionaria de los precios de los alimentos tanto los elaborados con azúcar y los de otros origen, como las carnes.
Asimismo de no resolverse o no llegar a una resolución que no afecte tanto a consumidores, productores, cañeros, ingenios e industriales, implicará la quiebra generalizada de los 57 ingenios del país, la mayoría de ellos ya rescatados a principios del 2001, por el gobierno de Vicente Fox.
Ante el desplome del precio de la tonelada de azúcar, los cañeros del país demandan se mantenga el anterior costo ya que representa la quiebra de los principales ingenios azucareros del país y de los productores ya que la anterior administración federal reajusto a la baja el valor de la azúcar ante la creciente importación de fructosa.
Por ello cañeros y azucareros de todo el país están bloqueando los accesos de los ingenios hasta que no se mantenga el valor real del edulcorante.
En este sentido el líder de la Unión Nacional de Productores de Caña, Daniel Pérez Valdés, sostuvo que lo único que buscan con la toma de las 54 bodegas de los ingenios ubicados en el interior de la República, es que el gobierno federal actual vuelva a mantenerles el precio anterior para evitar el desplome del dulce y la quiebra en los productores, es decir el que desapareció el ex mandatario panista Felipe Calderón Hinojosa.
La decisión fue tomada a raíz de que el precio por tonelada de azúcar cayó de 10,600 pesos (unos USD 838) en la zafra anterior, a 8,000 pesos (unos USD 633) actualmente.
Los trabajadores de la industria cañera de México mantuvieron por segundo día consecutivo, un retén en los 54 ingenios de azúcar que operan en el país, en protesta por la baja del precio del edulcorante que resultó de un excedente de producción e importaciones.
Productores de caña de la Confederación Nacional Campesina (CNC) y la Confederación Nacional de Propietarios Rurales (CNPR) solo dejan pasar el azúcar destinado a exportación que sale de los 54 ingenios que operan en 15 estados del país, y de los que dependen unos tres millones de personas.
Daniel Pérez Valdez puntualizó que de apoyarlos el gobierno federal en funciones, esperan tener una zafra 2012-2013, superior a la anterior y que sería de 49 millones 858 mil toneladas de azúcar, es decir un 7.28 % más que la pasada.
Indicó que por el momento la solución al conflicto se encuentra en manos del titular de la Secretaria de Economía, Ildefonso Guajardo Villarreal, quién en cualquier momento podría dar a conocer precios –por tonelada de la azúcar- así como de las importaciones a los Estados Unidos.
Pérez Valdés, hizo hincapié en que en México existen 166 mil productores de caña, los cuales cultivan 720 mil hectáreas en promedio de caña de azúcar.
El cultivo, dijo, se lleva a cabo en 227 municipios establecidos en 15 estados de la Nación. E indicó que todos ellos trabajan para 54 ingenios azucareros que son los que mantienen en sus manos.
Especificó el líder cañero que dicha actividad representa en promedio un 3.9% del Producto Interno Bruto (PIB) y otorga 450 mil empleo directos y más de 2 millones 500 mil indirectos.
Sentenció que de seguirse desplomando el precio del azúcar --que se toma como referencia para el pago de la tonelada de caña-- observado durante el ciclo de 2012/2013, tanto los productores como los abastecedores afiliados a la Unión Nacional de Productores de Caña de Azúcar, de la CNC, continuarán tomando acciones de supervisión en el proceso de comercialización del dulce que sale de las bodegas de 54 ingenios del país.
Insistió en que no es imposible que los abastecedores de caña alcancen a cubrir sus costos de producción y mucho menos obtener alguna utilidad que haga rentable la actividad productiva agrícola de esta industria, considerada la más antigua e importante del medio rural mexicano.
Aclaró que en virtud de que la comercialización del azúcar la realizan solamente los ingenios, sin la participación de los proveedores de la caña, si el azúcar se comercializa a precios por debajo del margen necesario para que los productores obtengan ingresos cuando menos para cubrir sus costos y así atender las necesidades más ingentes de las familias campesinas, entonces la agroindustria de la caña entrará en grave riesgo de cerrar sus fuentes de trabajo.
Pérez Valdés hizo saber que de la producción de caña dependen, de manera directa, 450 mil empleos y 2 millones 500 mil fuentes laborales indirectas, lo que implica una dinámica difícil de afrontar.
Especificó que por esa razón, existen inventarios sin posibilidad de comercialización nacional o internacional y, por otro lado, las industrias nacionales, con la autorización de instancias gubernamentales, importan hasta 2 millones de toneladas de fructosa.
Puntualizó que la supervisión de bodegas con diversas cantidades del producto almacenado, permite garantizar el pago de las deudas de los ingenios, en tanto buscan la forma de cubrir sus financiamientos y el pago de cartera vencida en que han caído por la falta de liquidez.
Dejo claro que desde hace algunos meses se iniciaron negociaciones entre las organizaciones de productores de ambas centrales, y la industria azucarera, sin haber llegado a acuerdos satisfactorios para cubrir el ajuste del precio de la caña del 6 por ciento de la zafra de 2006 – 2007, y las pre-liquidaciones y liquidaciones respecto de la zafra de 2007 – 2008.
Indicó que en el marco general de negociaciones, se planteó ante instancias gubernamentales la posibilidad de garantizar el pago de adeudos mediante la intervención de inventarios en bodegas de los propios ingenios deudores, en tanto se gestionaba la comercialización del producto.
Terminó revelando que los industriales de la caña de azúcar han mostrado ser incapaces de administrar adecuadamente los ingenios y menos pagar a tiempo la entrega de caña. Regularmente reciben la materia prima, que es la caña, la procesan hasta llegar a azúcar refinado, si es posible la comercializan y "se olvidan" de que tienen que pagar a los cañeros.
Ante la cadena de acontecimientos eso significaría "una pérdida para los productores de caña (...) de alrededor de 37%", dijo Anselmo Paniagua, asesor general de la Unión Nacional de Productores de Caña de Azúcar, que forma parte de la CNC y fue creada hace 75 años.
El líder, que aboga por que el precio del azúcar permanezca al mismo nivel de la zafra pasada, estimó que la cosecha de 2013 ascenderá a 5.8 millones de toneladas, cuando el consumo nacional es de apenas 4 millones.
Riesgos de quiebra generalizada
Los trabajadores manifestaron que seguirán tomando los ingenios hasta que el precio del azúcar cambie de rumbo. De no ser así, se declarará en quiebra este sector, que aporta el 0.50% del Producto Interno Bruto de México y del cual dependen directamente 450,000 personas e indirectamente 2.5 millones, según los cañeros.
La baja del precio del azúcar se puede explicar por el "excedente en México de producción, derivado de errores en política económica al permitir cupos de importación a sabiendas de que (...) había suficiente azúcar como para abastecer el mercado nacional", explicó Paniagua.
El año pasado, hubo importaciones por cerca de 300,000 toneladas de azúcar, "principalmente de Nicaragua", por lo que México se ve obligado a vender sus excedentes a Estados Unidos, añadió.
El líder se quejó de que ingresa al país "mucha fructosa a precios dumping, y también eso está provocando el alza en automático del (precio del) azúcar, que es un edulcorante de mucho mejor calidad".
Del total de 54 ingenios, 19 se encuentran en el estado de Veracruz, que concentra gran parte de la producción de azúcar en México, cuyo valor a nivel nacional asciende a unos 2,300 millones de dólares anuales.
El resto de los ingenios están repartidos en Puebla, Morelos (centro), Sinaloa, Colima, Nayarit, Jalisco (oeste), Quintana Roo, Campeche (este), Chiapas y Oaxaca (sureste).
En Puebla, los trabajadores de la industria cañera tomaron el ingenio de Atencingo y que anualmente industrializa unos 4 millones de bultos de azúcar, informó el líder de la Confederación Nacional de Productor Rurales, Miguel Ángel Sosa.
"Todo esto está pasando por las políticas de Felipe Calderón (expresidente de México). Perjudicó a la cadena productiva por imponer impuestos a las empresas refresqueras por endulzar con nuestro producto, y benefició a los extranjeros dedicados a la producción de fructosa", comentó.
