IXTAPALUCA, Méx. Cansados de que todos los años las aguas negras inunden sus viviendas, decenas de vecinos asentados en las márgenes del canal Guadalupe Victoria han intentado vender sus propiedades, pero nadie las quiere comprar. Como cada año las aguas negras penetran en su vivienda, Blanca Guerra ya no ha comprado muebles y dejó vacía la parte baja de su casa. “Solamente arriba tenemos nuestras camas mi hija y yo.” “Ya no tenemos dinero para comprar nuevamente una sala o un comedor; antes lo hacíamos, pero ya no tenemos recursos”, apuntó.
Dijo que uno de sus compañeros de trabajo había mostrado interés por el inmueble, pero declinó comprarlo al escuchar en los noticieros que la zona se inunda frecuentemente. En el área hay por lo menos 20 familias que han querido vender sus casas, pero cuando los interesados se enteran de que el canal que corre por un costado es el Guadalupe Victoria, han declinado las ofertas. Los afectados por la inundación del miércoles pasado mandaron un escrito al gobierno estatal para solicitar algún tipo de ayuda material, que no sean despensas, pues aseguran que cada vez que se desborda el canal, sólo les entregan una bolsa con sopa, aceite, frijol y unas galletas.
Los vecinos coincidieron en que los primeros años les prometieron que los iban a apoyar con algunos enseres, pero hasta el momento eso no ha sucedido. En tanto, las labores de limpieza en la colonia Ampliación ya concluyeron, pero siguen en la carretera federal México-Puebla, de donde han tenido que retirar desde motores hasta sillones y troncos que arrastró el agua. Efectivos del Ejército y de la Agencia de Seguridad Estatal también han apoyado a los vecinos de la Unidad Habitacional San Jacinto, quienes ayer cerraron la carretera para exigir que los equipos de limpieza se trasladaran al lugar. Ángeles Velasco/ Corresponsal
Dijo que uno de sus compañeros de trabajo había mostrado interés por el inmueble, pero declinó comprarlo al escuchar en los noticieros que la zona se inunda frecuentemente. En el área hay por lo menos 20 familias que han querido vender sus casas, pero cuando los interesados se enteran de que el canal que corre por un costado es el Guadalupe Victoria, han declinado las ofertas. Los afectados por la inundación del miércoles pasado mandaron un escrito al gobierno estatal para solicitar algún tipo de ayuda material, que no sean despensas, pues aseguran que cada vez que se desborda el canal, sólo les entregan una bolsa con sopa, aceite, frijol y unas galletas.
Los vecinos coincidieron en que los primeros años les prometieron que los iban a apoyar con algunos enseres, pero hasta el momento eso no ha sucedido. En tanto, las labores de limpieza en la colonia Ampliación ya concluyeron, pero siguen en la carretera federal México-Puebla, de donde han tenido que retirar desde motores hasta sillones y troncos que arrastró el agua. Efectivos del Ejército y de la Agencia de Seguridad Estatal también han apoyado a los vecinos de la Unidad Habitacional San Jacinto, quienes ayer cerraron la carretera para exigir que los equipos de limpieza se trasladaran al lugar. Ángeles Velasco/ Corresponsal
